Software EAM de Gestión de Activos Empresariales en España

Un software de gestión de activos empresariales o EAM (Enterprise Asset Management) es una solución tecnológica que permite a las empresas optimizar el uso, mantenimiento y ciclo de vida de sus activos operativos.

Estos activos pueden ser equipos industriales, maquinaria, instalaciones, o cualquier otro recurso físico fundamental para el funcionamiento de una organización.

Al implementar un EAM, las empresas pueden gestionar de forma centralizada todo lo relacionado con la adquisición, el mantenimiento preventivo y correctivo, el monitoreo en tiempo real y la disposición final de sus activos.

El software EAM es esencial para mejorar la eficiencia operativa y garantizar que los activos estén en óptimas condiciones de funcionamiento durante el mayor tiempo posible.

Con un EAM, las empresas no solo pueden planificar y ejecutar proyectos relacionados con sus activos, sino también monitorear el rendimiento y la durabilidad de estos a lo largo del tiempo. Esto les permite reducir tiempos de inactividad, mejorar la toma de decisiones y, en última instancia, reducir los costos operativos.

Tipos de software de gestión de activos empresariales

Al hablar de software de gestión de activos empresariales, es importante entender que existen diferentes tipos de EAM según cómo se implemente y las necesidades específicas de la empresa.

Estos se dividen en tres categorías principales: software en la nube, software on-premise y software híbrido. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, y la elección dependerá de los requisitos de seguridad, movilidad y personalización que tenga tu empresa.

Software EAM en la nube

Esta es una solución SaaS (software como servicio), donde el software se aloja en los servidores del proveedor y es accesible a través de Internet. La ventaja principal de este tipo de EAM es su accesibilidad desde cualquier lugar, lo que lo hace ideal para empresas con equipos distribuidos en varias ubicaciones.

También es fácil de implementar y no requiere una gran inversión inicial.

Sin embargo, la empresa depende de la infraestructura del proveedor, lo que puede limitar el control sobre la seguridad y el acceso a los datos.

Software EAM on-premise

En contraste, este tipo de software se instala directamente en los servidores y sistemas internos de la empresa. Ofrece mayor control sobre la seguridad y la personalización, lo que lo convierte en una buena opción para empresas que manejan datos sensibles o tienen necesidades específicas.

Sin embargo, la implementación es más costosa y complicada, y la movilidad es limitada en comparación con las soluciones en la nube.

Software EAM híbrido

Como su nombre lo indica, combina elementos de ambas soluciones, permitiendo que parte de la gestión se realice en la nube y otra parte en los servidores internos de la empresa. Esta opción proporciona flexibilidad, permitiendo el acceso remoto a ciertas funciones sin sacrificar el control interno de la empresa.

Diferencias entre EAM y CMMS

Al buscar una solución de gestión de activos, es común encontrarse con términos como EAM y CMMS (Sistema de Gestión de Mantenimiento Computarizado).

Si bien ambos sistemas comparten algunas funciones, como la gestión del mantenimiento de activos, existen diferencias clave que es importante conocer antes de tomar una decisión.

Un CMMS se centra en la gestión de mantenimiento, permitiendo a las empresas registrar y monitorear las órdenes de trabajo, programar tareas de mantenimiento preventivo y gestionar inventarios de repuestos. Su objetivo principal es mantener los activos en funcionamiento, reduciendo el tiempo de inactividad y optimizando las actividades de mantenimiento.

Por otro lado, el EAM abarca una visión más amplia, ya que no solo se enfoca en el mantenimiento, sino en todo el ciclo de vida de los activos, desde la adquisición hasta su disposición.

Un software EAM integra aspectos como la planificación financiera, la gestión de contratos y la evaluación de riesgos, lo que permite a las empresas tomar decisiones estratégicas sobre sus activos en función de datos integrados.

En resumen, el CMMS es una parte del EAM, que ofrece un enfoque más completo y de largo plazo en la gestión de los activos.

Diferencias entre EAM y PIM

Otra confusión común es entre EAM y PIM (Gestión de Información de Productos). Aunque ambos son sistemas de gestión, se enfocan en aspectos completamente distintos de la operación empresarial. Mientras que el EAM se centra en la gestión de activos físicos, el PIM está diseñado para gestionar la información de los productos, como descripciones, precios, imágenes y especificaciones técnicas.

Un PIM es utilizado principalmente por equipos de ventas, marketing y comercio electrónico, con el objetivo de garantizar que la información del producto sea precisa y esté disponible en todos los canales de venta.

En cambio, un software de gestión de activos empresariales es utilizado por equipos de operaciones y mantenimiento para optimizar el rendimiento de los activos físicos de la empresa.

El PIM busca mejorar la experiencia del cliente y aumentar las ventas, mientras que el EAM busca reducir costos operativos y maximizar la vida útil de los activos.

¿Cómo elegir un buen software EAM?

Definir los problemas que deseas resolver

Antes de elegir un software EAM, es crucial identificar cuáles son los principales desafíos que enfrenta tu empresa. ¿Buscas mejorar el mantenimiento preventivo? ¿Tienes problemas con la gestión de inventarios?

Tener claro qué quieres solucionar te ayudará a filtrar las opciones y seleccionar la solución que mejor se ajuste a tus necesidades.

Integración con otros sistemas

El software de gestión de activos empresariales no opera en un vacío. Es importante que pueda integrarse sin problemas con otras plataformas que ya estés utilizando, como un CMMS o un sistema de gestión de la cadena de suministro.

Esto permitirá que toda la información fluya de manera continua y centralizada, lo que facilita la toma de decisiones basada en datos.

Facilidad de uso

No basta con que el EAM sea potente; también debe ser intuitivo y fácil de usar para los empleados que lo utilizarán a diario. Un software complicado puede ralentizar la implementación y generar resistencia en el equipo.

Asegúrate de que la interfaz sea accesible y que cuente con opciones de capacitación.

Soporte y escalabilidad

Es esencial que el proveedor del software ofrezca un buen servicio de soporte, ya que la implementación de un software de gestión de activos empresariales puede requerir asistencia técnica continua.

Además, asegúrate de que el software pueda crecer junto con tu empresa, permitiendo agregar módulos o funcionalidades a medida que tus operaciones se expanden.

Costos y retorno de inversión

Finalmente, considera los costos tanto iniciales como a largo plazo. Algunos softwares de gestión de activos empresariales requieren una alta inversión inicial, mientras que otros ofrecen modelos basados en suscripción.

Evalúa el retorno de inversión potencial y asegúrate de que los beneficios superen los costos.